El antiguo centro educativo carece del más elemental mantenimiento, presentando un estado de abandono y corrosión tal que causa vergüenza y que aboca irremediablemente, más pronto que tarde, al cierre de algunas de las asociaciones allí presentes
La presidenta del PP de Telde, Sonia Cáceres, ha tenido ocasión de visitar ayer lunes 10 de octubre el antiguo colegio Rafael Alberti, ubicado en el Valle de Jinámar.
En esta instalación de titularidad municipal tienen su sede un importante grupo de colectivos sociales y entidades sin ánimo de lucro, entre ellas la acreditada Asociación Ya era Hora, organización con 23 años de vida que desarrolla una encomiable labor procurando entretenimiento a niños y jóvenes que padecen enfermedades oncológicas y apoyando a sus familiares y que, en palabras de su presidente Marcos Ruiz, ha logrado “crear un hogar” que “ahora se encuentra en peligro”.
El PP de Telde se siente apenado del estado de cosas allí existente. El abandono allí contemplado es absoluto, y lo visto en él (puertas de hierro a punto de caerse corroídas por el óxido, escombros donde campan a sus anchas las ratas, ausencia de alumbrado en el patio, importantes humedades por falta de permeabilización del techo, etc.) es indigno de un municipio como el nuestro. Menos aún de un centro donde acuden a jugar niños que sufren de cáncer. Telde no se merece esto.
Así, a la vista de la insustituible labor asistencial que estas entidades desempeñan para el conjunto de la sociedad teldense y grancanaria de manera completamente altruista, el PP de Telde no se explica la desidia del gobierno municipal y del Cabildo para tratar de paliar en la medida de lo posible algunas de sus necesidades materiales más acuciantes, al menos aquellas que les permitan continuar desarrollando su actividad a corto plazo.
