Los ciudadanos de Telde, se merecen tener un alcalde que no ande culpando a otros de su pésima gestión, que asuma sus responsabilidades políticas y no recurra a echar balones fuera, basta de chiquilladas, basta de culpar a otros, Telde necesita un gestor serio y responsable que priorice las necesidades de la ciudad por encima de las mentira y el enredo
No hay un solo día en que no aparezca la ciudad de Telde en los medios de comunicación y no precisamente por temas de los que podamos sentirnos orgullosos.
En los últimos días hemos sabido la pérdida brutal de subvenciones (1.574.000€). Se suma que Telde está entre los cuatro municipios canarios que aún no han fijado zonas de bajas emisiones. El Tribunal de Cuentas ha reprochado a Telde no contar aún con un sistema de información interno que permita a cualquier persona presentar de forma anónima escritos sobre posibles infracciones o irregularidades.
Por si esto fuera poco ayer hemos sabido que por primera vez en la historia del municipio, se ha producido la pérdida de los Programas de Formación en Alternancia con el Empleo (PFAES) y que esta situación supone no solo la pérdida de 75 puestos de trabajo, sino también de la oportunidad de formación de estas personas para aspirar a un empleo cualificado con los títulos que habrían obtenido.
Lejos de reconocer todos estos batacazos el alcalde de Telde, Juan Antonio Peña, se dedica a salpicar a todo el mundo en lugar de asumir sus responsabilidades, y echa la culpa a los demás, como en el caso de los PFAES, al Gobierno de Canarias.
Los ciudadanos de Telde, se merecen tener un alcalde que no ande culpando a otros de su pésima gestión, que asuma sus responsabilidades políticas y no recurra a echar balones fuera, basta de chiquilladas, basta de culpar a otros, Telde necesita un gestor serio y responsable que priorice las necesidades de la ciudad por encima de las mentira y el enredo. Maribel Castro