Agüimes rindió homenaje a su memoria rural con una de las citas más emblemáticas de las fiestas del Rosario, que continúan hasta el próximo 12 de octubre

Un manto amarillo cubrió este sábado las calles cercanas a los molinos de Lolita y Ananías, donde miles de personas vestidas con ropa tradicional lanzaron gofio a diestro y siniestro en un ambiente de alegría y diversión. Al compás marcado por Banda Isleña, la 48ª edición de la Traída del Gofio y del Agua rindió homenaje un año más al pasado agrícola del municipio de Agüimes, recorriendo el camino que se realizaba para elaborar este producto emblemático de la gastronomía isleña.

La celebración, un tributo a las costumbres que han forjado la identidad del municipio durante siglos, es uno de los actos más esperados de las fiestas del Rosario. Desde las 16:30 empezaron a llegar a los molinos de Lolita y Ananías grupos de festejadores, en el comienzo de la carretera que lleva a Guayadeque, ya bien cargados de bolsas de gofio que no tardaron en espolvorear sin miramientos a todo el personal presente.

Unas horas después comenzó la bajada, amenizada por Banda Isleña con un repertorio de canciones populares, coreadas por la muchedumbre que, al caer la tarde, se fue disipando hacia las calles del pueblo. Allí el gentío continuó la fiesta al son de los torpes pero divertidos pasos de baile de los papahuevos, y se prolongó hasta altas horas de la noche con una verbena en la plaza del Rosario en la que participaron Star Music, Son de la Isla, Mallombe y DJ Promaster.

La Traída emula el camino que los antiguos habitantes de Agüimes recorrían cuando iban a los molinos, a buscar el gofio que se elaboraba con el millo de su propia cosecha. Con este festejo se honra la memoria de los vecinos y vecinas que antaño hacían ese recorrido, en un sano ambiente de celebración familiar y jolgorio colectivo.