Un hombre que durante 35 años colaboró desinteresadamente con la parroquia de San Gregorio desde la época en que era párroco, don José Díaz Alemán, tiene que recluirse en la intimidad de su casa, ante situaciones nunca vividas en Telde y que dejan mucho que desear acerca de la falta de respeto con ciudadanos nobles y respetados
Ignacio González Santana,vecino de la calle Ruiz y persona ampliamente conocida en el barrio de San Gregorio,preparaba cada año un altar en la calle Juan Diego de la Fuentes, en honor de la Virgen del Carmen.
Ignacio González, fue el año pasado maltratado por el beato delincuente condenado en firme por la justicia, con el silencio cómplice del alcalde de Telde, Juan A. Peña.
Debido a la mala experiencia vivida el maestro florista, ha decido este año hacer el altar a Nuestra Señora del Carmen en su casa, por su fe hacia la patrona de los marinos, así se evita que personajillos de cuarta categoría le humillen de nuevo.
Un hombre que durante 35 años colaboró desinteresadamente con la parroquia de San Gregorio desde la época en que era párroco, don José Díaz Alemán, tiene que recluirse en la intimidad de su casa, ante situaciones nunca vividas en Telde y que dejan mucho que desear acerca de la falta de respeto con ciudadanos nobles y respetados.
Nos hacemos eco de esta noticia, para que sepan los vecinos de Telde, que no se puede permitir que la falta de respeto de un cateto, haga que un ciudadano que vive y paga sus impuestos en esta ciudad, tenga que confinar su altar al interior de su casa.