Se olvida Juan Antonio Peña, que hemos visto las facturas de Gestel, en las que no solo se pagan los servicios de esta persona, sino de otra más muy cercana al mismo, y el último encargo laboral han sido los banderines y la decoración que han colocado en toda la zona de San Juan con motivo de las fiestas del Santo Cristo, donde una vez más vuelve a poner el escudo corporativo y no el oficial, propio de su analfabetismo reiterado, en paño que colgaba en el Ayuntamiento frente a la Iglesia de San Juan
El alcalde de Telde Juan Antonio Peña, contestando a las preguntas hechas hoy por la concejala Esmeralda Cabrera de Vox, respondió mintiendo como ya viene siendo habitual en el.
A la pregunta de porque transitaba una persona, ajena al personal municipal por la azotea del Ayuntamiento de Telde, dirigió toda la responsabilidad a la Policía Local, olvidándose que él es el jefe de la policía ya que esta concejalía no la ha delegado, lo que demuestra una cobardía palpable de no asumir responsabilidades y que es el el único que permite que esto suceda.
En referencia al material sensible que existe en las dependencias municipales, se despachó diciendo que no había documentos sensibles porque hoy existe la administración electrónica, pero no dice que todavía hay multitud de cosas que pueden hurtarse de un despacho, no tan solo documentos.
Cuando ya fue de traca, es cuando dice que esta persona con la que presuntamente mantiene una relación de “amistad”, no cuesta un euro al Ayuntamiento, que todo lo hace por su buena voluntad de que todo salga adelante, y que es la Iglesia quien le hace los encargos y tiene con el algún acuerdo económico.
Se olvida Juan Antonio Peña, que hemos visto las facturas de Gestel, en las que no solo se pagan los servicios de esta persona, sino de otra más muy cercana al mismo, y el último encargo laboral han sido los banderines y la decoración que han colocado en toda la zona de San Juan con motivo de las fiestas del Santo Cristo, donde una vez más vuelve a poner el escudo corporativo y no el oficial, propio de su analfabetismo reiterado, en el paño que colgaba en el Ayuntamiento frente a la Iglesia de San Juan.
No nos mienta más señor Alcalde , no tome a su pueblo por tonto, hágale a este individuo un contrato con arreglo a la legalidad vigente, deje de estarse columpiando y haga las cosas correctamente.