Juan A.Peña.Candidato de Ciuca a la alcaldía de Telde

Hemos sido la única oposición durante estos últimos cuatro años, y lo hemos demostrado. La ciudadanía nos lo reconoce y nos sentimos orgullosos de haber sido altavoz de tantas situaciones injustas y de otras tantas llenas de propuestas. De ahí, a que nos situemos en las próximas elecciones como la única y real alternativa al gobierno actual de NC-CC. Cuatro años de trabajo, de responsabilidad, y lo principal, día a día en Telde, a pie de calle, en los barrios.

Uno de los temas más interesantes y a la vez más preocupante es el estado de abandono y de desidia en el que se encuentra – por lo general – el patrimonio histórico de nuestra ciudad. Uno de los ejemplos más dolorosos es el estado del barrio de San Francisco, en ese conjunto histórico-artístico del que nos sentimos orgullosos los teldenses. No voy a describirles su estado, lo hemos hecho desde la oposición durante todo este tiempo, los escritos, ruegos en los Plenos Municipales y una amplia hemeroteca nos avala nuestro compromiso. Ahora es el momento de hablarles de un plan de gobierno, de actuación y que sea real, se trata de ir con la verdad por delante.

Lo primero, un plan de embellecimiento, que sus paredes encandilen con su particular blanco, que sus jardines estén bien cuidados, atendidos y que ofrezcan su mejor cara, como antaño. La rehabilitación de sus plazas, bancos, pérgolas, cruces y demás elementos. San Francisco debe disponer de un plan, analicemos cuándo fue la última vez que se tomó en serio su valor, que se realizó alguna actuación considerable. Inadmisible en cualquier ciudad o territorio que valore su patrimonio, su historia, su cultura. Tenemos que recuperarlo, es posible.

La finca de San Francisco, otra oportunidad para el barrio. La conocida “casa roja”, que se erige junto al templo franciscano y que posee dos fanegadas de terrenos está llamada a ser rehabilitada y darle utilidad. Para ello el Ayuntamiento debe conveniar con la Diócesis de Canarias para que no siga mostrando su peor cara, para que no sea imagen de desidia, de ocupación o de vandalismo. Sus terrenos pueden recrear caminos y pasajes entre plantas y flores, un pulmón verde para la serenidad. Respecto a su utilidad, puede idearse proyectos enfocados a las personas con discapacidad o mayores, eso sí, en armonía y con la aportación de ideas de la ciudadanía. Todo en consenso.

Su iglesia, epicentro del conjunto histórico, debe abrir sus puertas a sus vecinos y visitantes. Un museo de arte sacro, la rehabilitación de sus obras, y la adquisición de otras tantas. El municipio cuenta con la voluntad de artistas locales que han ofrecido sus obras de manera altruista a la institución, a su ciudad, y que por dejadez, el gobierno local no les ha prestado atención. Es el momento de exhibir el talento teldense. Telde oportunidad para sus hijos e hijas.

El yacimiento del Bailadero y otros lugares de interés prehispánico deben ser tratados por arqueólogos y expertos para convertirse en verdaderos reclamos turísticos. La basura no puede habitar en nuestras joyas arqueológicas. Debe exhibirse nuestra historia, con protección y el necesario mantenimiento.

San Francisco también es oportunidad de ocio, ferias e incluso mercadillos. Recuperar sus fiestas, sus fastos a su patrono es posible, eso sí, con la delicadeza y tradición que les caracterizó en su pasado. Recuperar sus exposiciones, obras de teatro o tardes de títeres. Conocer su pasado para recuperar su presente y futuro, para ello, contar con sus vecinos, con nuestro querido cronista D. Antonio María González Padrón, miembro académico correspondiente de la Real Academia de la Historia y con la ciudadanía teldense y con la comisión necesaria de Patrimonio y la creación de un nuevo espacio con expertos en embellecimiento, bellas artes y personas con experiencias demostradas para recuperar Telde.

Sus calles empedradas nos invitan a congregar ferias o mercadillos mensuales. ¿Y si recuperamos los mercados de flores y plantas que en el pasado llegaron a celebrarse? Estos eventos, que pueden celebrarse una vez al mes, pueden ser la oportunidad para el emprendimiento, para los jóvenes, para personas mayores, artesanos etc. ¡Dejémonos llevar por el encanto de San Francisco, pensemos en positivo, podemos recuperar su encanto! Con la verdad por delante.