Los trabajos han permitido renovar 230 metros lineales de colectores y 170 metros lineales de albañales
El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha reabierto al tráfico, este viernes, la calle Juan Manuel Durán González tras finalizar los trabajos de renovación y mejora de la red de saneamiento, una actuación enmarcada en el Plan Estratégico del Ciclo Integral del Agua 2024-2033 que han permitido la renovación de 230 metros lineales de colectores y 170 metros de conexiones de los edificios a la red general.
La concejala de Aguas, Inmaculada Medina; acompañada en la reapertura por la directora general de Emalsa, Mercedes Fernández, y el director de la obra, Marcos Salazar, ha explicado que se ha logrado adelantar significativamente la finalización de la obra, originalmente prevista para dos meses, completándola en menos de un mes. “Empezó el 8 de julio y estaba previsto para el 30 de agosto. Se ha hecho un trabajo inmenso, no solo por parte de la compañía, sino también por las empresas que se han incorporado para hacer cuanto antes la obra de acometida”, ha apuntado Medina.
Para minimizar las molestias a la ciudadanía, Emalsa, en colaboración con el Ayuntamiento, duplicó el 15 de julio los recursos humanos y materiales asignados a esta obra, lo que permitió acelerar los trabajos en esta arteria principal de la ciudad y concluir con cuatro semanas de antelación. Durante este período, también fue necesario desviar el tráfico, lo que implicó la presencia de agentes de la Unidad de Tráfico de la Policía Local y Agentes de Movilidad, así como la coordinación del desvío de las paradas de transporte público de Guaguas Municipales y Global.
Las obras, con un presupuesto de licitación de 269.090 euros, se desarrollaron en la calle Juan Manuel Durán González, entre las calles Galicia y Olof Palme, y en las calles adyacentes Diderot, entre Thomas Alva Edison y Juan Manuel Durán González, y Bernardo de la Torre, entre Ruiz de Alda y Juan Manuel Durán González. En total, se renovaron 230 metros lineales de colectores y 170 metros lineales de albañales (conexiones de los edificios a la red general), además de instalar dos pozos de red nuevos y renovar cinco existentes, y ejecutar 15 registros domiciliarios de la red de saneamiento.
También se renovaron siete dispositivos de la red de pluviales, se instalaron dos nuevos, y se realizó la obra civil de la calle, que incluyó el hormigonado y asfaltado de las zanjas, así como la reposición de las marcas viales en todo el tramo.
Entre las incidencias destacadas durante los trabajos, se descubrió una antigua galería de ladrillo, con más de un siglo de antigüedad, a cuatro metros de profundidad, la cual no estaba registrada en los planos.