Bienestar Social, el OAD y la Federación del Garrote Canario abren el plazo de inscripción a esta iniciativa, que se impartirá todos los lunes de julio y de septiembre en la plaza de la Catedral  

El Área de Bienestar Social del Ayuntamiento de La Laguna, el Organismo Autónomo de Deportes (OAD) y la Federación de Lucha del Garrote Canario vuelven a unirse este año para poner en marcha la Escuela de verano de lucha del garrote adaptada, una iniciativa de alcance insular que quiere acercar este deporte tradicional a las personas con discapacidad y aprovechar sus acreditados valores psicosociales y de bienestar físico, todo gracias a un método formativo especializado que, además, quiere visibilizar y favorecer la inclusión y normalización de las personas con discapacidad. 

La plaza de la Catedral de La Laguna, ubicada en pleno centro del Conjunto Histórico de esta ciudad Patrimonio de la Humanidad, volverá a ser la sede de los encuentros y talleres de esta Escuela estival de la localidad, que se impartirá todos los lunes de julio y septiembre, en horario de 9:30 a 13:00 horas. Ya se ha abierto el plazo de inscripción para esta acción abierta y gratuita, que se puede realizar llamando al teléfono 699 630 431 o a través del correo electrónico luchadelgarroteadaptada@gmail.com 

Esta iniciativa ha demostrado, en estos últimos años, “que los deportes y juegos tradicionales son acciones terapéuticas de alto valor, una actividad saludable al aire libre que permite mejorar la psicomotricidad y fomentar valores tan importantes como la cooperación y el trabajo en equipo, a la vez que las personas participantes aprenden elementos de nuestra identidad, se sienten reconocidas y mejoran la capacidad de atención, la autoestima y las habilidades físicas, sociales e intelectuales”, explica el concejal de Bienestar Social, Rubens Ascanio. 

Por su parte, la monitora de la Federación de Lucha del Garrote Canario, Nanda Donate, especializada en esta formación adaptada, destaca la convivencia que se genera en este entorno entre personas con distintas realidades, pero que se unen en torno a una práctica de “inclusión real y para la que hemos desarrollado un método de enseñanza específico con una larga experiencia”. 

“Los beneficios de esta práctica son valorados positivamente por las personas usuarias, cuidadoras, terapeutas y familiares, ya que se produce una mejora importante en socialización con el grupo y la mejora en la coordinación motora. De hecho, esta práctica complementa la rehabilitación física en algunos casos y, en otros, les permite acercarse, por primera vez, a una actividad física-deportiva”, señala. 

La Lucha del garrote adaptada es un proyecto consolidado en La Laguna y que se imparte, durante el resto del año, en distintos centros de la localidad. Y uno de los problemas detectados por las entidades participantes era que la paralización de la actividad durante el verano suponía un importante retroceso para estas usuarias y usuarios, que necesitan mantener rutinas y disciplinas que, en definitiva, van asociadas a su calidad de vida. 

De ahí que, para mantener la actividad y minimizar la desconexión, en un trabajo de colaboración entre la Administración local y el tercer sector, se haya apostado por mantener la actividad durante los meses de julio y septiembre y sacarla a una plaza tan transitada, mostrando así a la ciudadanía la “importantísima labor que se desarrolla en esta escuela de verano, también para la puesta en valor y difusión de un deporte propio de nuestro territorio, con una larga tradición histórica y tan importante para nuestra identidad”, añade Ascanio. 

La Laguna Inclusiva 

Este programa se enmarca en la estrategia integral del Área de Bienestar Social denominada La Laguna Inclusiva, un programa transversal y de actualización continuada que quiere habilitar todas las herramientas y recursos necesarios para que las personas con discapacidad que residen y visitan el municipio puedan desarrollar su vida de la forma más autónoma posible y acceder, en igualdad de condiciones, a la atención pública, el empleo, el ocio, la cultura, el deporte y la participación en las políticas que les afectan. 

Y para ello, está creando espacios de participación social y estableciendo medidas para garantizar el derecho a la igualdad de oportunidades de las personas con discapacidad, planteado desde la autonomía personal y la no discriminación, todo ello con un trabajo constante con el colectivo y con una apuesta por proyectos innovadores que han convertido al municipio en un referente canario en materia de inclusión.