La formación nacionalista recuerda que su moción no se pudo votar el 24 de junio debido a que el PSOE alargó deliberadamente el Pleno con dos comparecencias voluntarias

El grupo de CC del Cabildo de Tenerife exigirá la retirada del borrador del Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Nacional del Teide durante el Pleno Extraordinario que tendrá lugar este jueves (día 7), a partir de las 12:00 horas. La formación nacionalista recuerda que su moción no se pudo votar el pasado 24 de junio porque el PSOE alargó deliberadamente el Pleno con dos comparecencias voluntarias con el fin de no tratar las mociones y preguntas presentadas. Como consecuencia de la acción del grupo de gobierno, tanto CC-PNC como el PP y Si Podemos Canarias solicitaron un Pleno Extraordinario que tendrá lugar este jueves.

CC rechaza el actual documento que se encuentra en información pública porque es muy restrictivo y aboga por una regulación consensuada con la ciudadanía y los sectores afectados para determinar las actividades que se puedan realizar en el Parque Nacional del Teide. La consejera nacionalista, Blanca Pérez, señala que “hemos mantenido reuniones con prácticamente todos los sectores e incluso en los próximos días continuaremos con estos encuentros para que nos hagan llegar sus aportaciones. Todo el mundo coincide en que es un documento malo y que hay que regular las actividades, pero de forma consensuada”.

Para Pérez, “es fundamental regular las actividades, pero no prohibirlas todas, que es lo que quiere hace el PSOE. Cualquiera que lea el borrador del PRUG se dará cuenta de lo que estamos diciendo. El Cabildo tiene mucho que decir, pero el PSOE, una vez más, se ha puesto de lado y no es capaz de liderar las reivindicaciones de la ciudadanía y los colectivos. Parece que Pedro Martín defiende más los intereses de Ángel Víctor Torres y Valbuena que los de Tenerife. El jueves tendrá la oportunidad de demostrarlo en el Pleno Extraordinario”.

Blanca Pérez señala que es necesario que el Gobierno de Canarias realice una  evaluación rigurosa de situación del espacio y en una proporción y correspondencia argumentada entre las medidas propuestas y los efectos esperados y todo ello, ordenando un régimen de uso público y actividades tradicionales que no comprometan la integridad de sus valores. Al respecto, asegura que “nuestro objetivo es que el PRUG que se vaya a aprobar tenga el mayor consenso posible y que las actividades que se realicen sean compatibles con los principios y valores de conservación y respeto del medio natural”.