Es intolerable y un insulto no solo para las concejalas de la oposición sino para las que están en en el gobierno, porque cuando se agrede verbalmente a una compañera, se las agrede a todas, otra cosas es que se queden como estatuas de sal ante los insultos más propios de un energúmeno que de alguien que lleva los destino de esta noble ciudad
La última en sufrir los improperios de Juan Antonio Peña, ha sido Pilar Mesa, concejala de grupo municipal de CC, antes ya lo hizo con la portavoz de Nueva Canaria Celeste López y con la concejala de Vox Esmeralda Cabrera.
En el Pleno ordinario celebrado el pasado viernes en las Casas Consistoriales de Telde, llamó “ignorante política” y que “le preparaban sus intervenciones” a la edil Pilar Mesa, sin que en ningún momento esta le hubiera faltado al respeto en su turno de ruegos y preguntas y es que que EL «trato vejatorio y misógino» del alcalde de Telde está ya alcanzado cotas impresentables.
Es intolerable y un insulto no solo para las concejalas de la oposición sino para las que están en en el gobierno, porque cuan do se agrede verbalmente a una compañera, se las agrede a todas, otra cosas es que se queden como estatuas de sal ante los insultos más propios de un energúmeno que de alguien que lleva los destino de esta noble ciudad.
Pilar Mesa, portavoz adjunta y secretaria del grupo municipal de Coalición Canaria en Telde, ha dado sobradas muestras de honestidad y honradez inquebrantable, no se dejandose manipular cuando la desvergüenza orquestada contra su compañero de partido, Héctor Suárez.
Las faltas de respeto de Peña no son un suceso aislado, lo ha estado haciendo en los 21 meses que lleva al frente de la alcaldía y lo seguirá haciendo porque forma parte el guion que se prepara para los Plenos.
Lo gracioso de este tema es que en cada Pleno se lee un manifiesto contra la violencia machista cuando el alcalde de Telde ejerce la violencia verbal contra las concejalas de la oposición una forma de agresión que se ejerce a través del lenguaje y que causa daño emocional, algo realmente intolerable y que al debe ponérsele fin a como de lugar.