Flores, regalos, aplausos y alguna que otra lágrima presidieron el acto de despedida a quien a lo largo de cinco décadas de ejercicio ha sido siempre una funcionaria ejemplar. Así lo destacaron algunas de las personas que tomaron la palabra para recordar la figura de la homenajeada. De Pino Méndez todos destacan su ética de trabajo, sus valores y su lealtad hacia la institución a la que ha dedicado la mayor parte de su vida

Comenzó a trabajar en el Ayuntamiento hace 50 años, en 1972. Pino Méndez, interventora del Ayuntamiento de Agüimes, tesorera municipal durante la mayor parte de su trayectoria profesional, cumple medio siglo ejerciendo como funcionaria pública al servicio de la ciudadanía. Este viernes, en el día de su jubilación, recibió el reconocimiento de sus compañeros, en un emotivo acto de homenaje celebrado en Salón de Plenos municipal.

Flores, regalos, aplausos y alguna que otra lágrima presidieron el acto de despedida a quien a lo largo de cinco décadas de ejercicio ha sido siempre una funcionaria ejemplar. Así lo destacaron algunas de las personas que tomaron la palabra para recordar la figura de la homenajeada. De Pino Méndez todos destacan su ética de trabajo, sus valores y su lealtad hacia la institución a la que ha dedicado la mayor parte de su vida.

Natural de Agüimes, entró a trabajar en el Ayuntamiento de su pueblo con tan solo 16 años, formando parte del llamado Servicio Social Femenino, que durante los últimos tiempos del franquismo era realizado por mujeres jóvenes, siempre que fuesen solteras, como requisito para poder acceder a un trabajo remunerado, entre otras prerrogativas. Al cabo de un tiempo de trabajo voluntario, fue contratada por la institución para hacerse cargo, por un sueldo de 3.000 pesetas al mes, de diversas labores administrativas. Esa primera experiencia le permitió pasar por prácticamente todos los departamentos municipales, adquiriendo un profundo conocimiento de los mecanismos y procedimientos de la administración.

Mujer inquieta e inconformista, pudo compaginar su trabajo con los estudios universitarios para completar la licenciatura en Derecho, una titulación que le permitió presentarse a las oposiciones, obtener una plaza de técnico de administración general y, a partir de ahí, asumir mayores responsabilidades. Rigurosa, visionaria, resolutiva, a lo largo de sus cinco décadas de servicio ha estado directamente implicada en la progresiva modernización de la institución, desde la época en que los tributos municipales eran cobrados casa por casa o las facturas de proveedores se pagaban con talones bancarios hasta la actual administración electrónica, más cómoda, sencilla y eficaz.

En el acto de homenaje, el alcalde de Agüimes, Óscar Hernández, quiso destacar su carácter pionero y su gran determinación, gracias a la cual, en los inicios de la democracia, pudo romper el techo de cristal de una sociedad machista y de un entorno institucional dominado por hombres. Supo hacer valer sus conocimientos, formación y experiencia para no solo asumir puestos de máxima responsabilidad sino también marcar las directrices del trabajo diario en la administración, liderar equipos humanos y jugar un papel fundamental en las decisiones estratégicas que supusieron el crecimiento y la mejora de la administración municipal.