La semana que viene la empresa adjudicataria del proyecto cerrará parte de la explanada para comenzar a sustituir el adoquinado y conectar ambos tramos 

La obra que une la explanada de la zona del dique sur del Burrero con el nuevo sendero marítimo, que se está ejecutando en la actualidad y que conecta ambos tramos, es la última fase del proyecto para finalizar este proyecto en la zona de costa del municipio y abrirlo a la ciudadanía. 

La alcaldesa Ana Hernández y la concejala de Urbanismo, Victoria Santana, acompañados por técnicos municipales, se han encontrado este miércoles en este tramo de la obra con técnicos del Cabildo, que le han explicado el estado actual del proyecto e informado que la semana que viene comenzarán a actuar en la explanada para sustituir el adoquinado y conectar ambas zonas. Esta última fase tendrá una duración aproximada de dos semanas y no afectará al tránsito de peatones porque se habilitará un tramo para ello. 

Ana Hernández destacó la importancia de ejecutar este último tramo de un proyecto “que va a ser muy importante para las personas que residen aquí y usuarios de nuestra playa porque la zona de costa del municipio se dota de un atractivo más, aunque ha tenido varios retrasos por diferentes motivos a los que ya se les va dando solución”. 

Por su parte, Victoria Santana explicó que el Cabildo ha propuesto una nueva transición entre el camino de madera y el adoquinado existente en la explanada que nos parece muy correcto y que solucionará los problemas del cambio del sendero hacia el espacio duro de la explanada”, y aseguró que los técnicos se coordinarán para el cierre del espacio junto al dique sur por tramos para que se pueda levantar el adoquín y colocar lo que falta para que este punto de enlace quede terminado cuanto antes y abrirlo al público”. 

La continuación margen izquierdo del paseo marítimo en El Burrero tiene una longitud de más de 500 metros, desde el dique sur hasta la desembocadura del barranco de Guayadeque, y el ancho oscila entre los 2,50 y los 5,00 metros, dependiendo del tramo. El trazado es adecuado con el medio y su entorno y atiende a unas dimensiones de los itinerarios peatonales que garanticen circulaciones agradables y cómodas.

El paseo se dotará de un mobiliario acorde con el paisaje, que imita a los ‘callaos’ de barranco. Además, se completará el mobiliario con piedras naturales de gran tamaño que proporcionan elementos diferenciados para la aparición de vegetación en su entorno.

Los bancos, papeleras, ceniceros y demás mobiliario de tipo escultórico a instalar estarán formados por piezas prefabricadas de hormigón decapado, y con motivos de madera.

Como elementos de límite o de señalización se utilizarán pivotes de madera. El sendero también contará con una instalación de alumbrado público.