Desde el mes de febrero de 2024, venimos recibiendo un acoso desmesurado por parte de un vecino inconforme y del Ayuntamiento de Telde que no ha querido esclarecer la cuestión. Poseemos una Licencia de Apertura de actividades clasificadas desde el año 1988 (vigente en la actualidad)
La Sala de Fiestas La Bella Época de Telde agradece públicamente los miles de mensajes recibidos de clientes, amigos y buenos vecinos, que nos dan la fuerza para continuar con esta situación que nos ha tocado vivir. Después de una trayectoria de más de 40 años bajo la dirección de Juan Francisco Naranjo López en esta profesión, nos vemos en la necesidad de aclarar que hemos sido prudentes al decir que nos íbamos de vacaciones para no generar más complicaciones con el procedimiento en el que nos hemos visto envueltos.
Desde el mes de febrero de 2024, venimos recibiendo un acoso desmesurado por parte de un vecino inconforme y del Ayuntamiento de Telde que no ha querido esclarecer la cuestión. Poseemos una Licencia de Apertura de actividades clasificadas desde el año 1988 (vigente en la actualidad). Es cierto que ha habido un dilema con el vecino reseñado y su problemática de ruidos. Sin embargo, nosotros hemos hecho lo pertinente, interponiendo dos denuncias a este vecino, ya que la responsabilidad de transmisión es suya, a nuestro entender, al no ejecutar correctamente la obra de la vivienda que construyó colindante con la Sala de Fiestas. Sobre eso, el juzgado se pronunciará, y quizás, se pueda esclarecer, de donde parte el problema.
Nos parece extraño que el Ayuntamiento de Telde no se pronuncie ante estas denuncias nuestras, y si, a estar filtrando informaciones falsas sobre un negocio al que no han realizado una inspección en 40 años. Tristemente nos vemos inmersos en temas legales que tendrán continuación en el contencioso administrativo que se celebrará próximamente en Las Palmas de Gran Canaria, donde se aclarará si este proceder es válido. El Ayuntamiento notificó el cierre de la Sala de Fiestas en agosto, por lo que nos dejaba solo un mes para defendernos. La inspección técnica tuvo lugar el 31 de mayo y se notificó el cierre el 7 de agosto, por lo que, si la sala tuviera elementos tan graves que solventar, tendrían que haber cerrado inmediatamente y no dos meses después poniendo en riesgo a la población (que es lo que han dado a entender).
Solo tenemos palabras de agradecimiento por las muestras de afecto y cariño que nos han brindado. Juan Francisco Naranjo López, es, ante todo, padre, marido, abuelo… antes que gerente de un negocio. Los episodios bandoleros que se han ido sucediendo desde nuestro cierre son una muestra más de que existe mucho nerviosismo por alguna parte. Ni estando la sala cerrada paran de difamar, personas que escriben siguiendo patrones para dañar, perjudicar y erosionar la imagen de la sala, y con ello, la de nuestro público, empleados, etc. Hacemos un llamamiento a la cordura y dejemos que resuelva la autoridad competente.
Nuestro público es como una familia, pedimos respeto para ellos, no se puede atacar a cientos de personas con temas tan escabrosos. Estamos muy orgullosos de nuestros clientes, su trato, y su forma de pasarlo bien y disfrutar. Queremos transmitirles un mensaje de ánimo, a todos nuestros empleados que son padres de familia y a todas las orquestas que participan cada fin de semana dejándose el alma, para que nuestro público, disfrute y salga feliz. Pedimos que se resuelva este tema, lo antes posible para podernos volver a encontrar con ellos. Por nuestra parte haremos todo lo posible para que las cosas se demuestren con hechos y no con palabras.