El alcalde, José Manuel Bermúdez, acompañado por el concejal del distrito Suroeste, Javier Rivero, visitaron en la tarde del pasado lunes el estado de acabado de la zona para perros instalada en el parque de Santa Catalina, que cuenta con dos áreas diferenciadas para razas pequeñas y medianas, de unos 500 m2, y unos 800 m2, para las grandes
El alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, acompañado por el concejal del Suroeste, Javier Rivero, visitaron el pasado lunes el estado de terminación de la zona canina instalada en el parque de Santa Catalina, en La Gallega, una extensión dedicada a estas mascotas que constituye una de las áreas para este menester de las de mayores dimensiones de todo el municipio, “y que viene a satisfacer la demanda de las vecinas y los vecinos de la zona, una reivindicación expresada por las asociaciones de vecinos Unión La Gallega y El Humilladero en los presupuestos participativos”, argumentó el alcalde.
Rivero, por su parte, comunicó que “se trata de un parque canino con dos áreas diferenciadas muy extensas, ya que la dedicada a las razas pequeñas y medianas es de aproximadamente unos 500 m2 y la destinada a los perros grandes rondará los 800 m2” y agregó que “lo que significa que se trata de una instalación de estas características de las más grandes de todo el municipio de Santa Cruz”.
“Hay zonas de bancos con sombras –relata el concejal- y bebederos con suministro de agua, además de encabezar el parque canino un mural alusivo del artista Erik Air, cuyos modelos de perros han sido tomados de los canes recogidos en el albergue comarcal de Valle Colino”, anuncia Rivero, que argumenta que “es también una manera de llamar la atención sobre la necesidad de adopción de las mascotas acogidas en esta instalación radicada en la zona de la Finca España”.
Para finalizar, el concejal del Suroeste señala que “la actuación ha supuesto una inversión de 42 746,01 euros, directamente financiados por el distrito, que ha significado el desbroce del solar, eliminando toda vegetación, incluso en la parte de la rocalla perimetral, unos 789 m2 y 440 m2, en los dos espacios diferenciados por tamaños” y añade que “además, se ha procedido al vallado perimetral, de 1 metro de altura, de las dos zonas caninas, que dispone, además, de zonas de acceso con doble puerta de seguridad y puerta de acceso para vehículos de mantenimiento”.
“Y también se ha realizado –acaba Javier Rivero- un paseo entre las dos zonas valladas comunicando accesos de escaleras, con acabado asfáltico con bordillo lateral de protección, y concluyendo con el montaje de 6 bancos y 6 papeleras, que llevan implementados la realización y montaje de 4 carteles indicativos con la normativa de usos de las zonas”.