El director del Museo Néstor imparte una conferencia de entrada libre y gratuita el viernes día 19 de mayo, a las 18:30 horas

La Selva o Montaña de Doramas era una masa boscosa que se extendía a lo largo de siete millas, en la zona central de la isla de Gran Canaria, entre las actuales localidades de Teror, Firgas, Moya y Arucas. Daniel Montesdeoca García-Sáenz, director del Museo Néstor y doctor en Historia, recrea la visión poética y pictórica de este paraje mítico, a través de una conferencia en la Casa-Museo Tomás Morales de Moya. La cita es el día 19 de mayo, a las 18:30 horas, con entrada libre y gratuita, hasta completar aforo.

En la historia de la literatura encontramos numerosas referencias a la Selva de Doramas y a Los Tilos, de la mano de autores como Torriani, Cairasco de Figueroa, Viera y Clavijo, Hermanos Millares, Tomás Morales, Miguel de Unamuno. “Y al escribir de Los Tilos, muchos de ellos hacían referencia también a su gran amenaza: ¡el hacha! No menos referencias a dicha selva encontramos en la obra de varios pintores isleños”, se apresura a recordar Daniel Montesdeoca al avanzar el contenido de su charla en la Casa-Museo Tomás Morales.

“Posee el término selva un significado que trasciende a la de bosque”, considera el museólogo, “tanto en cuanto parece revestido de simbologías de origen tropical; algo parecido a un sustrato exótico de aventurera narración propia de un Salgari”, asegura. Sin embargo, en la literatura canaria, la Selva de Doramas toma también un cariz poético, “de ensoñación de un pretérito mundo perdido, prístino, frágil, umbroso o mítico, que dejará profunda huella gracias a los versos de Cairasco de Figueroa y Tomás Morales”, continúa Montesdeoca. La añoranza de aquella Isla que perdió su alma boscosa parece latir aún en las composiciones de muchos artistas, entre las que sobresale la visión impresionista de Colacho Massieu, cita el director del Museo Néstor que asegura, por último, que “entre tonos de verde laurisilva, se acompasará la rima con destellos musicales y pinceladas de melancólico recuerdo”.