No veo la contención en el gasto ni que sepan el significado de la palabra austeridad, este gobierno que apenas frisa los 100 días de mandato, se olvida de la situación de muchas familias que no llegan a fin de mes, de vecinos que duermen al raso de la saturación de los servicios sociales y de las muchísimas carencias que tiene Telde

No se puede decir que haya comenzado con muy buen píe el gobierno que preside, Juan A. Peña, cuando va a invertir 99,000 euros por la vía de emergencia en la restauración de la escultura ‘La Mirada’, ubicada en la entrada del centro comercial, Las Terrazas, obra del escultor Sergio Gil, que ya en su momento fue ampliamente cuestionada.

En 2008, Gil aseguraba que el material de “La Mirada” era de origen alemán, servirá para impedir el deterioro de la escultura al estar ésta ubicada en una zona ventosa y con niveles altos de corrosión junto al mar.

Nada más lejos de la realidad, 15 años después de su inauguración presenta importantes desperfectos, está perforada y se caen trozos de la misma fruto de su oxidación, hecho que “supone un gran peligro”, por lo que gastar dinero público en una escultura que volverá a repetir los problemas porque seguirá oxidándose por su cercanía al mar es una banalidad .

Muchos ayuntamientos recuren al mecenazgo empresarial para el mantenimiento de sus esculturas y Telde tiene con las mismas una asignatura pendiente, pero por supuesto hay muchísimas cosas que requieren más la inmediata atención del gobierno que invertir en una escultura que cotidianamente va a necesitar el desembolso de dinero público para su mantenimiento.

El consignar 99,000 euros para restaurar una obra que bien podrían sufragar los comerciantes de La Terrazas, evidencia la escasa sensibilidad y conocimiento que tiene el tripartito de Telde de la realidad de nuestra ciudad.

No veo la contención en el gasto ni que sepan el significado de la palabra austeridad, este gobierno que apenas frisa los 100 días de mandato, se olvida de la situación de muchas familias que no llegan a fin de mes, de vecinos que duermen al raso de la saturación de los servicios sociales y de las muchísimas carencias que tiene Telde.

Esto está tomando un feo cariz populista muy feo, gastando a manos llenas un dinero que habría que invertir con mesura y no como antaño se hacía con la pólvora del Rey, tarde o temprano, las decisiones arbitrarias e imprudentes se tornaran contra aquellos que venían “con la verdad por delante”. Maribel Castro; directora de canariasinformativa.com