Reservados sin barreras, intérpretes de lenguas de signos o mochilas sensitivas son algunas de las herramientas que han permitido disfrutar de manera plena a las personas asistentes que presentan algún tipo de discapacidad 

Cientos de personas han abarrotado la plaza del Cristo de La Laguna en la tarde de este miércoles, 20 de septiembre, con motivo de la celebración de la verbena inclusiva. Esta segunda edición del evento, enmarcado en el programa de las Fiestas del Cristo, ha contado con diferentes actividades como pasacalles, animación y música, además de un punto naranja de información con diferentes recursos, intérpretes de lenguas de signos y personal para asistir en el manejo de las herramientas disponibles.  

Uno de los instrumentos estrella de la verbena inclusiva es la mochila sensitiva. Este material cuenta con tecnología de vanguardia y permite, gracias a las vibraciones, percibir la música y los sonidos a aquellas personas que padecen una pérdida auditiva severa. Estas mochilas no impiden a los asistentes moverse de manera libre, por lo que resultan muy cómodas y permiten a las personas que las usan elevar su experiencia de forma exponencial.  

La verbena, además, ha contado con un espacio reservado sin barreras para las personas que presentan alguna discapacidad física. Esto ha permitido a aquellos asistentes que utilizan sillas de ruedas, disponer de un espacio acorde en el que han podido disfrutar del espectáculo y sentirse completamente integrados e integradas con la música.