Juan Dávila-García. Radiotelegrafista del Estado

El –peloteo- infame de una política donde resalta la falta de ideas de la mayoría de los que la practican, o de los que se aprovecharon de la misma para hacer “fortuna” y consiguieron “enriquecerse”, José Bono un político “fatuo” que presidió la Comunidad de Castilla la Mancha y consiguió llegar a Presidente de Parlamento, es una prueba evidente de que en “política” todo cabe. 

José Luis Rodríguez Zapatero obtuvo la presidencia del Gobierno de España “inesperadamente” propiciado por los graves atentados de los trenes en Madrid ocurrido el 11 de marzo de 2004, él era consciente que no estaba preparado para ocupar tan alto cargo, y “siendo consciente” de su inutilidad formó un gobierno nombrando ministros a una “patulea de analfabetos inapropiados para regir un país como el nuestro especialmente en su segunda legislatura, y la decadencia fue la impronta de aquel gobierno indeseado e indeseable que llevó a España a la ruina total”.

Últimamente España viene padeciendo de una “incompetencia política jamás vista”, Zapatero primero y ahora “el impostor y mentiroso Sánchez” han hecho de nuestro país una verdadera “piltrafa”, la decadencia, la indecencia y el latrocinio son los testimonios más evidentes que la política se ha convertido en un negocio, posiblemente en el “negocio” más rentable que pueda existir, ahora los que se dedican a menospreciar este arte-ciencia hasta en las tarjetas de visitas se ponen de profesión “político”.

La política tiene que ser honorable y especialmente respetuosa con la ciudadanía, algo que en España no ocurre por la –mefistolíca- practica que hacen de la misma quienes lideran las instituciones, que cometen toda clase de delitos; cohecho, tráfico de influencias, prevaricación, apropiación indebida, usurpación de derechos y especialmente corrupción, con esta –panoplia- de pecados (por llamarlos de alguna forma más comprensible), es imposible que la recuperación de la inflación y de la deuda “llegue algún día.

 En España la miserabilidad del gobierno es tal que se suben sus sueldos en un 3,5%, mientras la mayoría de sus habitantes tienen que ir a Caritas y a los comedores privados para saciar su hambruna, hacen promesas que nunca cumplen, el infeliz de Torres presidente del gobierno de Canarias acepta –la promesa del ministro Bolaños de que le va a dar 1000millones, de euros para el arreglo de las carreteras, yo que Torres me sentaría para no cansarme a la espera de la llegada de ese dinero, que posiblemente nunca llegue, pero este inadecuado presidente de nuestra comunidad es tonto o se hace el tonto-.

 José Bono ha sido siempre como político un “demagogo” su superficialidad y cretinismo es algo que siempre lo ha identificado, además de su falsedad y posiblemente su desconocimiento del “decálogo y las características propias de un socialismo racional” que Pablo Iglesias le impuso al PSOE cuando llevó a cabo su fundación, su convicción como “socialista es irreal se amparó en sus siglas para evolucionar económicamente y lo consiguió, ya en 2010 poseía una gran cantidad de dinero en los bancos, y extensas propiedades, pisos en Madrid, cuadras con caballos de raza y hasta un hipódromo, la fortuna a veces le sonríe a quien se dedica hacer cosas que abochornan y el señor Bono hizo bastantes.

 Bono, Zapatero y López Aguilar, defienden la tesis de Sánchez de entregar a Marruecos el Sahara occidental (posiblemente para  no dejar a este infame sujeto con el culo al aire), algo que no se ajusta a la legalidad según las Naciones Unidas, ya que lo que se convino en su momento fue celebrar un referéndum y que los habitantes del Sahara decidieron su futuro algo que después de muchos años no se ha llevado a cabo, por consiguiente lo que procede es que las Naciones Unidas posibiliten la celebración de ese anunciado referéndum y las cosas se hagan dentro de la más estricta legalidad.

 José Luis Rodríguez Zapatero (a) –el ciruela-, es un personaje –oscuro- que no ha destacado en “nada”, su fracaso como presidente del gobierno fue –sonado-, y como licenciado en derecho no debe ser ningún “dechado de virtudes”, ya que se dedica a defender a los narcotraficante sudamericanos con los que mantiene una exquisita relación de los que recibe casi con toda seguridad unas buenas remuneraciones por los trabajos que les hace sean procedentes o improcedentes, esta es la forma de actuar de quienes no tienen ningún respeto por la legalidad, y lamentablemente en España hay muchos sujetos que se dedican a vivir del cuento y de los atentados que llevan a cabo contra las Leyes, ya que por desgracia nadie va a la cárcel el ser indultados por Sánchez y su gobierno, que se han convertido con esta forma de proceder en unos verdaderos “indeseables”.

España está condenada al “ostracismo”, la incapacidad de quienes nos gobierno la han llevado a esta situación, y revertirla va a costar muchos dolores de cabeza, y posiblemente hasta los ciudadanos de a pie tengamos que ajustarnos aún más el cinturón, tal vez sea la única posibilidad de salir adelante para que España vuelva a ser lo que siempre fue.