Llevo a Agüimes en las venas, amo a este pueblo que vive el presente sin olvidar sus antepasados, me nutro de mis recuerdos anclados como raíces en la memoria

Mis ancestros por parte materna, (tatarabuelos, abuelos, mi madre), proceden de Agüimes, concretamente del bellísimo Caserío de Temisas.

Yo nací en Las Palmas de Gran Canaria, pero pasé mi adolescencia y estudié mi bachillerato en el IES Joaquín Artíles de Agüimes, lo que me une no solo con mis antepasados, sino conmigo misma, con mi juventud vivida entre sus calles.

Es curioso, pero a medida que pasan los años todo parece ligarme a Agüimes, y se que nunca desaparecerán esos lazos, que me unen a este pueblo amado, y así mi hija vive en el Cruce de Arinaga y tengo dos nietas “lagarteras” lo que hará que ese nudo sea ya por siempre indisoluble.

Agüimes es un municipio moderno que sin embargo no pierde su idiosincrasia como pueblo, es digno de admirar sus progresos y la alta calidad de vida que sus gobernantes se han aplicado en mantener y consolidar.

Amo este municipio, donde aún me llegan los aromas de los duraznos, los nísperos, los olores de las aceitunas con pan… y si cierro los ojos , las imágenes del Chorro Santo, del paseo a la Molina, de la festividad de San Sebastián y Ntra Sra del Rosario, de mis compañeras de Instituto, de mi mentor Antonio Cerpa, auténtico artífice del devenir de los jóvenes tanto en la parroquia de San Miguel en Temisas, como en el IES Joaquin Artiles, referente de una juventud comprometida con su pueblo y sus costumbres.

Llevo a Agüimes en las venas, amo a este pueblo orgulloso y combativo que vive el presente sin olvidar sus antepasados, me nutro de mis recuerdos anclados como raíces en la memoria.

Allí pasé mi adolescencia, de ahí vienen mis raíces, ahí está mi descendencia, mi hija y mis dos nietas que prolongarán en el tiempo este lazo que perdurará por los siglos de los siglos. Maribel Castro