En su primera visita institucional en junio de 2023, Juan Antonio Peña, se comprometió in situ a hacer una hoja de ruta para que esté estuviera culminado en enero de 2024

El gobierno de Telde visitó en junio de 2023, a los pocos días de la toma de posesión el Mercado Municipal, donde se hicieron acompañar de los empresarios del mismo para mostrarles el estado de las obras de rehabilitación y mejora que desde el año 2018 se vienen ejecutando en este inmueble, cerrado al público desde entonces.

El alcalde Peña se comprometió in situ a hacer una hoja de ruta para que esté estuviera culminado en enero de 2024.

El concejal de Vías y Obras, Iván Sánchez, indicaba la pasada semana que había encargado la redacción del remate de las obras del proyecto de rehabilitación y que las acciones a realizar se centrarán en la sustitución de los canalones de cubierta, la rehabilitación del sótano con la colocación de pavimento y carpintería de aluminio y madera, la ejecución de los accesos, y la renovación integral de los vestuarios, incluyendo las instalaciones necesarias. Este encargo tiene un coste de 9.523 euros.

Pero aquí no culmina todo ya que aún según Sánchez, el Ayuntamiento deberá contratar la dotación de cámaras, que el Gobierno anterior dejó el proyecto listo y existe una subvención de más de 220.000 euros.

 Queda evidenciado que el compromiso del alcalde de Telde, en junio de 2023 de inaugurar las obras en enero del año en curso fue un brindis al sol, ya que como poco, ni tan siquiera en verano estará el mercado municipal terminado.

También fue una falacia el que asegurara que el grupo de gobierno mantendría mesas de trabajo continuas y prioritarias para escuchar las voces de los empresarios del mercado, ya que no han vuelto a reunirse más tras esta visita, y las noticias no son nada halagüeñas ya que vuelven a retrasar la puesta en marcha del Mercado Municipal.

Tampoco se ha reunido la concejala de Mercado con estos empresarios para decirles como va a ejecutar los pliegos de condiciones con la que optaran a acceder al nuevo edificio, ya que sus contratos están desde hace mucho caducados.